Más de 31.000 hectáreas y una combinación única de rutas, paisajes impresionantes y una rica herencia cultural y gastronómica. El Espacio Natural Protegido de mayor extensión de la provincia de Castellón, entre las comarcas del Alto Mijares, Alto Palancia y la Plana Baixa es un lugar ideal para rutas y eventos cicloturistas en Castellón.
La Sierra de Espadán, situada en la provincia de Castellón, es un destino privilegiado para los amantes del ciclismo de montaña (MTB). Este parque natural, el segundo más extenso de la Comunidad Valenciana, cuenta con caminos y senderos accesibles para pedalear mientras se disfruta de la variada naturaleza.
La accesibilidad de la ruta “circular desde Algimia de Almonacid por Jinquer” por el parque natural permite explorar diversos senderos y caminos de la sierra. En total, 32 km atravesando bosques de alcornoques y disfrutando de vistas panorámicas.

Los amantes del ciclismo de carretera podrán optar por recorridos como la “Ruta ciclista los 8 puertos de la Sierra Espadán” que ofrece una experiencia desafiante que atraviesa diversos puertos de montaña como el de la Nevera o Xován, combinando esfuerzo físico con la belleza del paisaje.
Aventuras
Para los ciclistas que buscan rutas exigentes, la Sierra de Espadán presenta recorridos como la ruta circular Sierra de Espadán desde Soneja sin sacrificar la belleza del entorno. También, el trazado circular de grava en el Parque Natural desde Chovar por Eslida. Esta ruta, catalogada como difícil, abarca 50 km con un desnivel positivo de 1.430 metros, ofreciendo una experiencia desafiante incluso para los más experimentados.
Para quienes buscan una experiencia de bikepacking, la ruta de 205 km con 5.620 metros de desnivel positivo es ideal. Este recorrido atraviesa sombríos alcornocales, profundos barrancos y pozas de aguas turquesas, ofreciendo una inmersión completa en la diversidad del paisaje de la Sierra de Espadán.
Llena de cultura
El patrimonio cultural de la Sierra de Espadán es igualmente notable. Puntos de interés como el Castillo de Almonacid, la Fuente del Cañar y los miradores de Aín y Xòvar enriquecen la experiencia ciclista, permitiendo combinar deporte y cultura en una sola jornada.

Platos tradicionales como los arroces de todo tipo o la olla de pueblo, elaborada con hortalizas frescas y carnes locales, reflejan la esencia de la dieta mediterránea de interior. Pero hay más actores en la cocina castellonense, las setas, las verduras, las carnes de caza, los aromáticos aceites. Todo regado con aguas de manantial minero-medicinal o con sorprendentes vinos.
El cicloturismo en la Sierra de Espadán es una oportunidad para conectar con la naturaleza, descubrir rutas de MTB adaptadas a diferentes niveles y sumergirse en una cultura rica en tradiciones y sabores. Cada pedalada revela un nuevo rincón, una nueva historia y una nueva experiencia que enriquece el alma del ciclista aventurero.