Los mejores ciclistas del mundo escogen España para hacer sus concentraciones o sesiones de entrenamientos. No es de extrañar ver a profesionales del WorldTour entrenar en Andorra, Calpe o Sierra Nevada.
Pero uno de los lugares más frecuentados es la isla de Tenerife, ya no solo para los profesionales, sino para todos aquellos amantes del ciclismo que quieren disfrutar del clima suave, el deporte y el paisaje de la isla.
La isla tenerifeña tiene una amplia red de carreteras y caminos a través de diferentes rutas ciclistas para todos los niveles, desde pedalear al nivel del mar hasta los 2.000 metros de altitud. Los desniveles de infierno y las carreteras infinitas mirando al Teide enamorarán a los ciclistas que decidan rodar por Tenerife.

Unas localizaciones espectaculares con buenas carreteras y puertos épicos.
Unas rutas bien acondicionadas que acompañadas de un clima suave permite practicar el ciclismo durante todo el año. La isla canaria es lo suficientemente grande para ofrecer diferentes alternativas para practicar el ciclismo, ya sea con una intención de entrenar, conocer la isla o pasear tranquilamente.
Una actividad imprescindible es ascender hasta los 2.325 metros de la desafiante ascensión al Teide, al cual se puede subir por sus diferentes vertientes desde las más tranquilas a más exigentes: desde el pueblo costero situado en el norte de Puerto la Cruz, por su vertiente sureña por Médano o desde Guía de Isora.
Desde la cima del Teide se pueden contemplar las mejores vistas de Tenerife y la Laguna
En la isla hay otras ascensiones como la de Masca con sus 3,8 km al 11,2% o los 10 km del mítico Puerto del Inglés con su desnivel del 5% de media. A través de una carretera pequeña te adentras en una pequeña selva llena de bosques. Otras subidas emblemáticas son el Puerto de la Cruz, El Bailadero o Las Cruces y El Tanque.
Sí, por lo contrario, se viaja a Tenerife con el objetivo de pedalear con total tranquilidad respirando la brisa del mar, una ruta más asequible es hacer el recorrido desde Icod de los Vinos hasta Punta de Toro. Un trayecto agradable a través de una carretera con poco tráfico y unas vistas espectaculares. Como esta, lo más habitual es que las rutas parten de zonas costeras para dirigirse poco a poco en dirección al interior de la isla.

Belleza natural
La tranquilidad de los pueblos de Santa Cruz de Tenerife, La Laguna, y Tegueste permiten conocer la vida en el interior de la isla. Unos municipios que forman parte del Parque Natural de Anaga con sus característicos profundos valles y barrancos que descienden hasta bellas playas.
Una de las zonas más exuberantes de la isla es la parte noroeste en la que se pueden hacer varios itinerarios ciclistas.
Un recorrido ameno es entre el Mirador de Cruz de Carmen y Roque Bermejo a través de un agradable paseo con playas, ríos, cascadas y miradores con vistas espectaculares. Por otra parte, la divertida y preciosa ruta por el Parque Natural de Corona Forestal une los núcleos urbanos del Parador Cañadas del Teide, Portillo Alto, Chipeque, Montaña Articosia, La Montañeta y Cosme.
Y si eres de esos que te pica la competición, en Tenerife hay 2 grandes eventos ciclistas a lo largo del año. Cada primavera las dos pruebas de la Vuelta al Teide atraen a ciclistas amateurs para correr la Gran Fondo de referencia en Gran Canaria. Las 5 pruebas de la Tenerife Teide 360 el 13 de abril son una ocasión inigualable para practicar el deporte por pistas de tierra conociendo municipios tinerfeños como Vilaflor de Chasna o Los Realejos.
Turismo, ciclismo, cultura y gastronomía formarán parte de una experiencia única en Tenerife que se puede acabar descansar en cualquiera de sus idílicas playas como Las Américas, Las Teresitas o la de Los Gigantes. Sin duda, es un gran reconfortante para recuperar las fuerzas.