En el mercado encontrarás decenas de marcas y tipos diferentes de lubricantes para la cadena (principalmente) y para las distintas partes móviles de tu bicicleta. Sin embargo, en ocasiones no son lo suficientemente ecológicos, sostenibles o simplemente te apetece ahorrarte algo de dinero en el mantenimiento creando tu propio líquido lubricante. Por eso en este artículo queremos darte la receta para crear tu propio líquido lubricante de manera sencilla.
Y es que la transmisión tiene una importancia vital. En artículos anteriores os contábamos cómo evitar el desgaste de la cadena de vuestra bicicleta, en otro analizábamos cómo saber cuándo es hora de cambiar la cadena de la bici y finalmente os contábamos también cómo engrasar la cadena de vuestra bici en unos sencillos pasos.
En este nuevo artículo os contamos cómo fabricar vuestro propio lubricante casero para la bicicleta. Y os daremos dos fórmulas de mezcla esenciales.
Pero antes de ello es interesante conocer los beneficios de crear vuestro propio lubricante:
- Ahorro: evidentemente uno de los mayores beneficios es el ahorro económico, pues los lubricantes que podemos conseguir en las tiendas en ocasiones se nos pueden salir de presupuesto.
- Tiempo: en ocasiones no tienes tiempo de ir a la tienda (o se encuentra demasiado lejos) por lo que tener la capacidad de crear tu propio lubricante será una interesante alternativa.
- Ecología: puedes crear tu lubricante en base a criterios ecológicos, evitando ciertos elementos más nocivos para el medio ambiente.
- Conocimiento: aprender sobre tu bicicleta es también aprender sobre su mantenimiento, no solo cómo funciona. Sabiendo crear tu propio lubricante tendrás un conocimiento más integral de tu bicicleta y de cómo funciona.
Lubricante casero normal
Antes de nada empecemos por los ingredientes:
- 100 ml de aceite mineral o de bebé. Será la base del lubricante que fabriquemos. Será el componente principal del mismo.
- 10 g de cera de abejas. Gracias a la cera conseguiremos que la cadena esté lubricada más
- 30 ml de Alcohol isopropílico. Su función es mejorar la limpieza y disolver posibles restos antes de que el lubricante haga su función.
Para prepararlo bastará con derretir al baño maría la cera. Una vez que esté en modo líquido simplemente habrá que mezclarla con el aceite en una proporción de 1 parte de cera por cada 10 partes de aceite. Es decir, si queremos hacer algo más de un litro de lubricante, pondremos 1 litro de aceite y 100 gramos de cera de abeja.
Una vez lo mezclemos bien añadiremos el alcohol isopropílico consiguiendo una mezcla homogénea.
Lubricante casero ecológico
En este caso usaremos ingredientes menos dañinos para el medio ambiente. De hecho solo tendrá dos ingredientes: aceite de oliva y cera de abejas. Eso sí, en este caso la proporción será de 1 a 2. Por cada 100 ml de aceite de oliva añadiremos 50 ml de cera de abeja ya licuada.
Y para preparar este lubricante para bicis natural y biodegradable simplemente deberemos fundir la cera de abeja sólida poniéndola al baño maría y después juntarla con el aceite de oliva.
Prueba a fabricar tu propio lubricante de bici y cuéntanoslo. Te escuchamos en nuestras redes sociales.