Máquinas, maillots, telas, tubos, tinta y más máquinas. Así es la fábrica de TACTIC Sport en la cuna del ciclismo catalán, Girona.
Un lugar que desde 1998 nacen los futuros maillots, culottes y accesorios de ciclismo de TACTIC para equipos profesionales, amateurs y ciclistas individuales.
Unas instalaciones que desde BICIO pudimos conocer en primera persona gracias a Decathlon, el cual nos brindó la oportunidad también de asistir a la presentación del nuevo e ilusionante equipo Decathlon Ford para 2025.
Junto a los periodistas invitados, el equipo francés y los representantes de los partners del Decathlon Ford empezamos una detallada ruta por la fábrica de TACTIC.

Un lugar no muy grande, pero justo para una producción clara y estructurada. Oficinas y máquinas, separadas por escasos metros, forman un engranaje que funciona a las mil maravillas.
El equipo humano es uno de los mayores activos de Tactic Sport. Diseñadores, costureros y técnicos trabajan en conjunto, aportando su experiencia y pasión por el ciclismo. Cada miembro juega un rol esencial para garantizar la calidad y la innovación de los productos.
En total, entre 45 y 50 personas trabajan en la fábrica, tal como nos explicó el márqueting project, Daan van Meeuwen quién se encargó de hacernos un Tour por las instalaciones.
Oficinas TACTIC
Todas las prendas y accesorios pasan por el departamento de marca que hace todos los diseños de marca y cosas de patrocinadores. Justo detrás, se sitúan las oficinas de atención al cliente y comercial que entienden las necesidades del cliente y trabajan en el diseño con el equipo de diseño.

Van Meeuwen nos explicó que el departamento que está en contacto con el cliente, hace la propuesta del diseño, tras escuchar al consumidor para saber el diseño que más necesita.
Producción
El recorrido dentro de la fábrica revela un proceso meticuloso. Desde el diseño inicial hasta la confección final, cada etapa refleja la obsesión de Tactic por la perfección.

La zona de producción en donde hay diferentes áreas se encarga de producir las prendas. En un extremo de la sala destacan muchos tubos enrollados, listos para imprimir los diseños en la zona de impresión.
Una vez el diseño está hecho, se pasa a la zona de tejidos en donde se usan los tejidos dependiendo del producto que sea. Inmediatamente, el producto pasa a la máquina de corte para cortar el diseño según las diferentes tallas y medidas.
Otra sección es la máquina de transfer, donde dos personas se centran en pasar el papel con los cortes de tejido. “Se aplica el diseño desde el papel al tejido final”, detalla el marketing project.

Todo proceso tiene su fin y el de las prendas de TACTIC acaba en la zona de control de calidad donde se garantiza que cada prenda cumpla con los estándares más altos. Una etapa final que se hace cuando llegan los productos después de la confección hecha en los talleres de confección repartidos por toda España.
En estas instalaciones hay otras áreas como la de acabados, expedición y la de R+D de prototipos. Todas unas zonas que forman un centro de creatividad, tecnología y pasión por el ciclismo. Visitarla es adentrarse en el corazón de una marca que no solo crea ropa, sino que define la experiencia ciclista.